A QUINTA DA AUGA SPA. Un lugar de refinamiento y paz
En Compostela hay hoteles con encanto, de lujo, buenos, excepcionales y solo una Quinta da Auga Spa. Es un Relais & Chateaux. Dícese de una asociación francesa, que no solo acepta a hoteles de lujo, sino a todos los lugares que tienen «algo especial», y se distancia del resto a marchas forzadas. Lugares únicos y excepciones, que tengan una personalidad y vida propia. Y todo el que visita este delicioso lugar sabe de lo que hablo.
Situado en las afueras de Santiago de Compostela, en un entorno de agua, verdor, paz y serenidad, pero a un paso del centro, tiene un enorme influjo visual cuando te aproximas a él. No solo es un precioso Pazo Gallego, del SXVIII de manual, sino que tiene una dilatada historia en el devenir de la historia de la ciudad. De pazo señorial, a fabrica de papel, aserradero, fabrica de cerveza o de hielo. Cuando la prestigiosa diseñadora Luisa García, con un gusto exquisito, se hizo cargo del edificio sabía que tenía una ingente tarea.
Con una especie de fusión de club de campo inglés y pazo gallego, las dependencias del A Quinta da Auga son una especie de anticuario, en donde cada pieza tiene su historia. Libros antiguos, chimenea barroca, antigüedades, e infinidad de detalles personales. Más que en un hotel, te da la impresión que estás de visita en la casa de un acaudalado noble gallego.
Habitaciones
Decoradas de forma individualizada, brillan por el esplendor de lo tradicional, mezclado con las más modernas comodidades. Suelo radiante, lencería fina, piedra vista, y unos baños de mármol en donde se combina también la decoración con papel pintado clásico. Las suites están situadas en zonas especiales, y disponen de camas king size, bañera de mármol y amenities Sundari.
Spa y restaurante
En un edificio aparte, se ha construido un lugar muy zen, que ofrece un coqueto y sereno SPA, combinando oriente con occidente. Una multitud de tratamientos, incluyendo además de la piscina termal, un SPA privado, y un exquisito flotarium.
Además del Q Café decorado como un bistro francés de los años 50, la cocina de La Filigrana, pretende ser el complemento gastronómico de calidad. Productos frescos, en un intento de mezclar cocina galaica, con nuevas tendencias. Nos sorprende también el enorme espacio para eventos privados, conferencias , bodas y banquetes. Lo más destacado del pazo, no es estar situado a un par de kilómetros del centro, sino los 10.000 metros cuadrados de zona verde, perfecto para desconectar y oxigenarse.
Sin duda, el alojamiento recomendado para un perfecta estancia en Compostela. Varios premios (como el Gold List 2010) reconocen, que A Quinta da Auga es el secreto mejor guardado, y opción preferente para una estancia de «alta calidad».